El Tiempo del alma

giovedì 16 aprile 2015

James Hillman. 12-4-26/ 28-10-11

Mi práctica me dice que ya no puedo distinguir claramente entre neurosis de uno mismo y neurosis del mundo, psicopatología de uno y psicopatología del mundo. Además, me dice que ubicar la neurosis y la psicopatología solamente en la realidad personal es una represión engañosa de lo que de hecho, en la realidad, se está experimentando.
El psicoanálisis tiene que salir de la consulta y analizar todo tipo de cosas. Tienes que ver que los edificios son anoréxicos, tienes que ver que el lenguaje es esquizofrénico, que la“normalidad” es maniaca y que la medicina y los negocios son paranoicos.

La palabra “normal” viene del griego “norma”, que era la escuadra del carpintero, ese herramienta en ángulos rectos para establecer la rectitud (straightness)
Las expectativas que sólo son estadísticas ya no son humanas.

Extraído: Fundación C.G. Jung de Psicología Analítica.

Ken Wilber. La conciencia sin fronteras

Ken Wilber. La conciencia sin fronteras
Lo cierto es que vivimos en un mundo de conflicto y oposición porque es un mundo de demarcaciones y fronteras. Y puesto que cada línea fronteriza es también una línea de batalla, henos aquí con la difícil situación humana: cuanto más firmes son nuestras fronteras, más encarnizadas son nuestras batallas. Cuanto más me aferro al placer, más temo, necesariamente, al dolor. Cuanto más voy en pos del bien, tanto más me obsesiona el mal. ... Ahora bien, la forma en que de ordinario intentamos resolver estos problemas es tratar de extirpar uno de los opuestos. Encaramos el problema del bien y del mal procurando exterminar el mal. ... Suponemos que la vida sería perfectamente placentera con sólo que pudiéramos anular los polos negativos e indeseables de todos los pares de opuestos. ... La cuestión no es separar los opuestos para lograr un "progreso hacia lo positivo", sino más bien unificar y armonizar los opuestos descubriendo un fundamento que trascienda y abarque a ambos. Y ese fundamento es la conciencia misma de unidad. ... Así la solución de la guerra de los opuestos exige que se renuncie a todas las fronteras, que no se siga con el malabarismo de jugar con los opuestos. La guerra de los opuestos es un síntoma de que se está tomando por real una demarcación, y para curar los síntomas debemos ir a la raíz misma de la cuestión: nuestras demarcaciones ilusorias. ... Cuando se comprende que los opuestos son uno, la discordia se disuelve en concordia, las batallas se convierten en danza y los antiguos enemigos se revelan amantes. Estamos entonces en condiciones de entablar amistad con la totalidad de nuestro universo, en vez de seguir manteniéndolo dividido por la mitad.

mercoledì 15 aprile 2015

Dr Richard Moss La Mandala del Ser Subtitulado en Español



"Tener conciencia es bendición y privilegio. Elegir vivir conscientemente es una obligación ".

"Cuando estamos presentes en nuestro cuerpo no estamos peleando en contra de la realidad, estamos sintiendo, percibiendo. Una de las primeras libertades es ver sin reaccionar, sentir sin reaccionar. Cuando reaccionamos no hay libertad, no podemos hablar de libertad. No hay elección. Es muy diferente saber algo a vivirlo. Cuando aprendemos a no reaccionar y a estar presentes en nosotros mismos estamos más claros, todo está bien.Es un sentimiento de ser uno con la propia vida. Todos sentimos ésto alguna vez, de repente nos llenamos de luz y nos sentimos dichosos.
... Estás bailando y te das cuenta que la danza y la vida lo hacen a través tuyo. Son momentos de gracia... como enamorarse . La vida te da esa bendición. Es como saborear nuestra propia naturaleza y saboreando podemos ver al otro como es de verdad."

Así está escrito en mi cuaderno de notas en uno de los tantos encuentros con Richard Moss, este amoroso maestro de la Conciencia.

giovedì 9 aprile 2015

mercoledì 8 aprile 2015

Emergencia Espiritual: "La comprensión de las crisis evolutivas." Por Stanislav Grof y Christina Grof

"El místico, dotado con talentos naturales ... y siguiendo ... las instrucciones de un maestro, penetra en el agua  y se da cuenta de que puede nadar; por el contrario, el esquizofrénico, no dotado, sin preparación y sin guía, se cae o se sumerge deliberadamente y se ahoga." Joseph Campbell


Sentimientos de unidad con el universo entero. Visiones e imágenes de tiempos y lugares lejanos. Sensaciones de corrientes vibrantes a través de todo el cuerpo, acompañadas de espasmos y fuertes  temblores. Visiones de dioses, semidioses y demonios. Vívidos destellos de luces brillantes con colores del arco iris. Miedo a caer en una locura inminente, o también a morir.

Cualquiera que experimente estos fenómenos extremos físicos y mentales es etiquetado inmediatamente como psicótico por la mayoría de los occidentales. Sin embargo, cada vez es mayor el número de personas que parecen haber tenido experiencias similares a las que acabamos de describir, y en lugar de caer irremediablemente en la demencia, con frecuencia emergen de estos estados extraordinarios con una mayor sensación de bienestar y un mejor funcionamiento en su vida diaria. Además, en muchos casos se han solucionado a lo largo de este proceso viejos problemas emocionales, físicos y mentales.

Podemos encontrar muchos paralelismos de incidentes parecidos en las vidas de los santos, de los yoguis, de los místicos y de los chamanes. De hecho, todas las obras espirituales y las tradiciones de todo el mundo validan el poder de curación y de transformación de tales estados extraordinarios para aquellas personas que los viven. Entonces, por qué las personas que tienen este tipo de experiencias en el mundo actual son rechazadas casi siempre como enfermos mentales?

Aunque existen muchas  excepciones individuales, la corriente principal de la psicología y de la psiquiatría, en general, no distingue entre misticismo y enfermedad mental. Estas disciplinas no reconocen oficialemnte que las grandes tradiciones espirituales que se han dedicado al estudio de la conciencia humana durante milenios tienen algo que ofrecer. Así, se ignoran y se desechan de manera indiscriminada los conceptos y prácticas que se encuentran en el budismo, el hinduismo, el cristianismo, el sufismo y otras tradiciones místicas.

Muchos sucesos de los estados no habituales de la mente, incluso aquellos que son dramáticos y alcanzan proporciones psicóticas, no constituyen forzosamente síntomas en un sentido médico estricto. Nosotros las consideramos como crisis en la evolución de la conciencia, o "emergencias espirituales", comparables a los estados descritos por las diversas tradiciones místicas del mundo.

La visión del mundo creada por la ciencia tradicional occidental, y que es la visión dominante en nuestra cultura, cuando se aplica en su forma más estricta es incompatible con cualquier noción de espiritualidad. En un universo en el que solamente son reales las formas materiales, tangibles y mensurables, se considera que todas las demás formas de actividad religiosa o mística reflejan ignorancia, superstición, irracionalidad o inmadurez emocional. De esta manera, las vivencias directas de realidades espirituales son interpretadas como "psicóticas", es decir, como manifestaciones de perturbaciones mentales.

Nuestras experiencias y observaciones personales, durante años de implicación en diversas formas de psicoterapia vivencial profunda, nos han conducido a la convicción de que es importante reconsiderar con ojos nuevos esta situación en la psiquiatría y en nuestra visión del mundo en general, para hacer una nueva valoración a la luz de la evidencia, tanto histórica como reciente.
Hace tiempo que debería haberse hecho una revisión radical del misticismo y de la psicosis. Una clara distinción entre estos dos tipos de fenómenos comporta consecuencias de gran repercusión práctica para aquellas personas que experimentan estados no ordinarios de conciencia, en especial cuando tienen un matiz espiritual.

Es importante reconocer las emergencias espirituales y tratarlas adecuadamente, porque poseen un gran potencial positivo de crecimiento personal y de curación, que normalmente sería eliminado por un enfoque insensible y una indiscriminada medicación de rutina.

martedì 7 aprile 2015

lunedì 6 aprile 2015

Richard Moss M.D.

"Lo único que le podemos dar a Dios es nosotros mismos, nuestro estado inmediato, cualquier cosa que sea lo que estamos experimentando.
Lo damos deviniendo Una Unidad con nosotros mismos, completos en la inmediatez de nosotros mismos. Cuando empezamos a vivir esta comprensión, empezamos a vivir una vida de fe".